Es un lío de polvo, a veces de colores. Nada estropea más el estilo de tu impresora que un cartucho de tóner con fugas. Con un poco de tiempo y paciencia puedes conseguir que tu impresora se limpie y vuelva a funcionar.  El polvo del tóner tiene una carga electrónica que puede provocar un cortocircuito en los aspiradores domésticos. Haz el trabajo bien y tendrás un cartucho de tóner limpio. Así es como se limpia un cartucho de tóner. Comienza por reunir los suministros que se indican a continuación:

• Guantes de goma o látex
• Toallas de papel
• Mascarilla no quirúrgica
• Bolsa de basura de plástico (o dos)
• Aspirador de tóner (opcional)  

Nota: no utilice una aspiradora estándar para limpiar un derrame de tóner.

Toma tu guante protector y tu máscara de respiración. La inhalación de polvo de tóner puede provocar dolores de cabeza, fatiga, náuseas y problemas respiratorios, por lo que debes protegerte. En primer lugar, asegúrate de que la impresora esté desenchufada de la toma de corriente y se haya enfriado durante aproximadamente una hora (los componentes se calientan dentro de las impresoras láser). Ponte los guantes y recoge la mayor cantidad posible de tóner seco derramado y tiralo a la basura. Necesitarás un rascador de bordes planos o una tarjeta postal rígida para sacar el tóner. Es posible que quieras usar una bolsa de basura separada sólo para el tóner suelto. Por último, limpia el exceso de polvo de tóner con una toalla de papel o un paño seco. 

Una vez que tengas el cartucho de tóner limpio, vuelve a instalar el cartucho en la impresora. Vuelve a conectar la impresora láser a la toma de corriente, enciéndela e imprime una página de prueba.